Perigueux, ciudad de arte e historia, ciudad "fleurie" ("flores")  

Merece la pena visitar Perigueux tanto en verano como en invierno. Los restos romanos testimonian una larga historia que Perigueux recuerda. El centro histórico actual fue construido en gran parte entre los siglos XVII y XIX, ocupando un lugar destacado la catedral de St Front. El casco antiguo tiene muchos edificios hermosos y las estrechas calles y plazas dan a nuestra ciudad una atmósfera maravillosamente agradable. Se puede hacer una excursión de descubrimiento a través de una ruta de senderismo señalizada. Otra atracción es el mercado, que tiene lugar dos veces por semana, los miércoles y sábados. Périgueux dispone de bonitas tiendas, una gama de delicatessen muy selecta en la que destacan los famosos productos del Périgord como el foie gras, los pasteles de hígado de ganso o de pato, las nueces, la pechuga de pato ahumada, las castañas dulces y las fresas. Por supuesto, también encontrará deliciosos vinos de Bergerac y Burdeos, por no hablar de algunas "chocolaterías" donde podrá admirar y comprar chocolate hecho a mano. Périgueux tiene muchos restaurantes -desde sencillos hasta excelentes- que definitivamente bien merecen una visita.

Durante los meses de invierno, en Périgueux tiene lugar el famoso "marché au gras", el "mercado de grasas". Aquí se venden productos que hacen famosa a la Dordoña. Todos los sábados de noviembre a marzo, los agricultores venden sus propios productos de ganso y pato. Las famosas trufas también se ofrecen en este mercado.

A lo largo del año hay muchas actividades organizadas con el enfoque en el verano. A la derecha encontrará un pequeño resumen con la agenda actual.

Périgueux está situado en el centro de Dordogne y en un radio de 60 km se pueden visitar muchos castillos interesantes, cuevas, pueblos bonitos y una hermosa naturaleza. Hay rutas de senderismo bien señalizadas por todas partes. El paisaje inclinado, atravesado por estrechas y tranquilas carreteras rurales, invita a hacer hermosos paseos en bicicleta deportiva. En el Périgord cada estación tiene su propio encanto y, sobre todo fuera de los concurridos meses de julio y agosto, se recomienda visitar la zona.